Sueño: el bebé se despierta por la noche, ¿qué hacer?

¿Cuánto es una noche de sueño completa para un bebé?
Contrariamente a lo que se podría pensar, una noche de sueño completo para un niño pequeño no corresponde a 7 u 8 horas de sueño ininterrumpido, como en el caso de un adulto. Para un bebé, una "noche de sueño completa" se define como 5 a 6 horas de sueño continuo. Puede parecer poco, pero para un bebé que en sus primeros meses se despierta muy frecuentemente para ser alimentado o cambiado, estas 5 a 6 horas ya son un gran logro. Los patrones de sueño de los bebés son de hecho muy diferentes a los de los adultos. Los ciclos son más cortos, alrededor de 50 minutos, con fases de sueño ligero más frecuentes. Así que, incluso si tu bebé empieza a dormir un poco más, puede que se despierte varias veces durante la noche.
¿Cuándo debes preocuparte?
Si bien la mayoría de los bebés comienzan a dormir mejor alrededor de los 6 meses, es perfectamente normal que haya fluctuaciones. Sin embargo, hay ciertas señales que pueden llevar a los padres a consultar con un pediatra o especialista del sueño.
A continuación se indican algunos puntos a tener en cuenta:
- Si tu bebé se despierta constantemente sin motivo aparente (está bien alimentado, no tiene fiebre, no está enfermo y su entorno es tranquilizador).
- Si a pesar de tus esfuerzos por establecer una rutina o un ambiente propicio, tu bebé no consigue dormir más tiempo por la noche a partir de los 9 o 12 meses.
- Si las noches alteradas se acompañan de dificultad para conciliar el sueño, irritabilidad importante o problemas de comportamiento durante el día.
En estos casos, un pediatra puede ayudarle a identificar las causas de los despertares frecuentes y sugerir soluciones adecuadas. Sin embargo, es fundamental no sentirse culpable: cada bebé tiene su propio ritmo, y esto no es un reflejo de tus habilidades como padre. Así que, repite después de nosotros “Soy un buen padre”.
Ayudar a que su bebé duerma toda la noche suele ser una prioridad para los padres jóvenes. La famosa expresión “dormir toda la noche” es sinónimo de un hito importante en el desarrollo de un bebé, pero cuando este momento tan esperado se retrasa o se interrumpe, puede convertirse en una fuente de preocupación. ¿Qué hacer si el bebé se despierta durante la noche? Descifremos qué significa realmente “dormir toda la noche”, a qué edad podemos esperarlo, cuándo preocuparnos y, sobre todo, cómo ayudar a nuestro hijo a dormir mejor.
¿A qué edad empieza un bebé a dormir toda la noche?
Aunque no existe una regla universal sobre la edad a la que un bebé comienza a...
Por las noches, miremos la ciencia y los estudios.
- Entre 3 y 6 meses: Se observa que la mitad de los bebés son capaces de dormir al menos 5 o 6 horas consecutivas.
- A partir de los 6 meses: Un estudio de 2018 publicado en Pediatrics mostró que aproximadamente el 38% de los bebés duermen 8 horas seguidas por la noche. Lo que significa que el 57% de los bebés de esta edad todavía se despiertan al menos una vez durante la noche.
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A partir de los 12 meses: se estima que el 72% de los bebés duermen toda la noche... con variabilidad. Factores como la dieta, el temperamento del bebé o incluso acontecimientos externos (dentición, enfermedad) pueden influir en su sueño. Esto deja a un 28% de bebés con dificultades para dormir toda la noche.
Como puedes ver, las noches completas no son automáticas para los bebés. Es importante recordar que cada niño tiene su propio ritmo de desarrollo. Si bien algunos bebés duermen varias horas seguidas a los 3 meses, otros pueden despertarse por la noche a los 8 o 9 meses, o incluso más tarde. Esto no quiere decir que haya un problema.

Consejos prácticos para ayudar al bebé a volver a dormirse mejor
Si su bebé aún no duerme toda la noche, unos pocos ajustes sencillos pueden marcar una gran diferencia en su sueño. A continuación se ofrecen algunos consejos prácticos para mejorar las noches de tu hijo y, por extensión, las tuyas:
Crea una rutina para la hora de dormir
Los bebés, al igual que los niños mayores, son sensibles a los rituales. Repita la misma rutina todas las noches, preferiblemente a la misma hora, con una hora fija para acostarse. Un baño relajante, un pañal limpio, un cuento, abrazos suaves y un entorno tranquilo ayudan a que tu bebé comprenda que se acerca la hora de dormir. Cuanto más regular y repetida sea la rutina, más la asociará tu hijo con el sueño.
Crear un ambiente propicio para el sueño
Elegir la cuna adecuada para el bebé es fundamental. Debe ser cómodo, apropiado para la edad y estar ubicado en un entorno tranquilo. Hasta los 4-6 meses, opta por una cuna o un moisés. Establezca una temperatura confortable en la habitación (entre 18 y 20°C), cree una oscuridad que favorezca el sueño y le ayude a diferenciar el día de la noche. Además, nada de pantallas antes de acostarse. La luz altera el ciclo del sueño (en los adultos también, por si acaso...).
Identificar los signos de fatiga
Un punto destacado por muchos especialistas: es necesario detectar los signos de somnolencia. Un bebé cansado muestra que es hora de dormir: se frota los ojos, bosteza, se pone inquieto. Si observas estos signos, acuéstalo rápidamente antes de que se canse demasiado, ya que esto puede hacer que sea más difícil conciliar el sueño.
¿Qué hacer si el bebé se despierta durante la noche?
Hemos seleccionado algunas ideas para probar en casa si tu bebé se despierta por la noche. Miedo a crear malos hábitos. Primero, desarrolle la confianza en sí mismo. Muchos padres tienen miedo de crear malos hábitos. “Déjalo llorar, ya se acostumbrará…” te dice la tía Janine. De hecho, al satisfacer sus necesidades, fortaleces su seguridad emocional. El que le permitirá ser más independiente más adelante. Confía en tus instintos y no te sientas culpable por abrazarlo o tranquilizarlo.
Identificar la causa del despertar
Entiende por qué se despertó tu bebé. ¿Tiene hambre, tiene mucho calor, dolor o necesita que lo cambien? También cabe señalar que, alrededor de los 4 meses, los bebés a veces experimentan una regresión en el sueño, vinculada a una transición natural a un nuevo ciclo.
Finalmente, a partir de cierta edad (alrededor de los 18 meses), los bebés ya no necesitan fisiológicamente alimentarse durante la noche. En este caso, tranquilízalo con palabras. Sí, podrá prescindir del biberón y de la alimentación nocturna. Otra pregunta importante: ¿es un hábito despertarse así? Observar y tomar nota para comprender y actuar mejor.
Promover la autonomía del sueño
Si su bebé se despierta en mitad de la noche, intente darle unos minutos para que intente volver a dormirse por sí solo antes de volver corriendo. Si no puede dormirse por sí solo, ve y tranquilízalo. Primero, sin entrar en la habitación, sino hablándole a través de la puerta, por ejemplo: “Estoy aquí, te escucho y todo estará bien”.
¿No está funcionando? Pasa al plan B. Entra en su habitación, acerca su osito de peluche.
Cerca de él, coloca tu mano sobre su cara, su vientre… Si sientes que realmente lo necesita (en caso de llanto por ejemplo), tómalo en tus brazos y mécelo.
Después de calmarlo, intenta colocar al bebé en su cuna para que vuelva a dormirse sin tus brazos. Objetivo: promover el sueño independiente. Mejor aún si tienes una cuna como la KUMI. Puedes dejar a tu hijo en su cama, mientras lo meces.
¿Qué tal el chupete para conciliar el sueño?
Algunos bebés sienten una fuerte necesidad de succionar, lo que los tranquiliza. En estos casos, el chupete puede ser una ventaja. Obviamente, hay que tener cuidado de no abusar del mismo para no crear una auténtica adicción (básicamente, lo recomendable es mantener el chupete sólo durante determinados momentos).
Otros bebés se quitarán el pulgar. Las madres que amamantan a veces tienen miedo de crear un “mal hábito” al poner a su bebé a dormir en el pecho. Nuevamente, confíe en sus instintos y hable con su pediatra, partera o un especialista en sueño cuyas palabras resuenen con usted.
Comuníquese con su niño pequeño
Otro consejo que puedo darte es que tranquilices a tu bebé. Siéntete libre de acompañarlo con tus palabras. Si es lo suficientemente grande, puedes hablar de ello durante el día para comprenderlo, guiarlo y evolucionar.
Si tu bebé aún no duerme toda la noche, no estás solo. Es completamente normal que esto lleve tiempo y cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Lo importante es tener paciencia, respetar las necesidades específicas de tu bebé y no dudar en pedir ayuda si te sientes abrumada. Con paciencia, una rutina tranquilizadora y un entorno que favorezca el sueño, contribuirás a que tu hijo tenga noches más tranquilas... y también las tuyas.
